lunes, 9 de enero de 2012

Reyes vuelve a casa por navidad



José Antonio Reyes Calderón, jugador del Sevilla F.C. nació el 1 de Septiembre de 1983 en Utrera (Sevilla). Debutó con el Sevilla en la temporada 1999-2000 en Primera División de la mano de Joaquín Caparrós ,a los 16 años, adjudicándose así el record al futbolista más joven en debutar en la historia del club sevillano y el de marcar un gol con la elástica hispalense en la historia de la Liga. Por ello se convirtió en una pieza clave en el conjunto sevillano y pasó a ser el objetivo de muchos clubes de España y de Europa.
En la temporada 2003-2004, se fijó en él Arsène Wenger, entrenador del Arsenal inglés, y le fichó por la cifra de 20 millones de euros, consiguiendo el título liguero y siendo el primer futbolista español que lo consigue. En la Champions League, temporada 2005/2006 también fue muy importante, llegando a derrotar a equipos como la Juventus de Turín y consiguiendo llegar a la final de copa frente al Barcelona, aunque no pudo ganarla.
En la temporada 2006-2007 fichó por el Real Madrid dónde consiguió marcar dos tantos frente al Mallorca y poder así ayudar a conseguir el título liguero con el club blanco.
El 30 de Julio de 2007 fichó por el Atlético de Madrid, por la cifra de 12 millones de euros. En el club rojiblanco no tuvo un buen recibimiento debido a su pasado madridista.



El Atlético de Madrid propuso una cesión al Benfica, donde le entrenaría Quique Sánchez Flores. En esa temporada pasó a ser una pieza clave en el equipo portugués y el Atlético de Madrid lo repescó con el propósito de que hiciera lo mismo en el club madrileño.



La primera mitad de temporada no fue muy buena para él, al igual que para el Atlético, pero con la destitución de Abel Resino y la llegada de Quique Sánchez Flores y con el paso de los partidos se fue ganando la confianza de los aficionados, para llegar a ser una pieza importante en dicho club, hasta el punto de llegar a ganar una UEFA Europa League y una Supercopa de Europa.
Ahora, en la temporada 2011/2012, y tras no jugar mucho debido a su mala relación con Manzano, pidió que le dejasen ir al equipo donde debutó y se formó como jugador. La afición sevillana está ahora más que contenta con la vuelta de "su niño prodigio" al club.